Definición: No es sujeto a susceptible a cambio.

Esencia de la Omnisciencia de Dios – Dios no cambia, no es voluble. Dios no progresa, no crece, no se hace más sabio (porque la suma de toda la sabiduría que hay Dios ya lo tiene). Para mi como un cristiano obediente, Dios nunca cambia. Pero Dios si arrepienta de su juicio cuando el hombre deja sus pecados para seguir a Dios. Con pecadores, la mecha de su ira no es sin fin, pero es largo (tiene paciencia y longanimidad).

Nuestra reacción a la Omnisciencia de Dios – Primero, esto es paralelo a la fidelidad de Dios, entonces debe provocar un sentido profundo adentro de nosotros de seguridad y estabilidad. Dios no se enojaría de repente con nosotros más allá que es su naturaleza. Todo corre establece aunque sí hay un fin a la paciencia de Dios.

Dios identifica como pecado una erupción de emoción y acciones que no tiene parámetros previamente dictado. Por ejemplo, Cristo echó afuera los que cambiaban dinero en el templo por un enojo controlado, porque Dios previamente ha dictado que su pecado era incorrecto. Dios también juzgó el mundo del día de Noé y Sodoma porque rompieron lo que Dios previamente ha dictado. Inmutabilidad no significa falta de acción (cualquier acción siendo un cambio). Inmutabilidad significa que “las reglas del juego” nunca cambia. El carácter de Dios y la forma en que Dios trata con las personas siempre es lo mismo. El juicio final de la humanidad no es un cambio para Dios, sino una culminación de varios de los otros atributos de Dios (Ira, Santidad, Misericordia para algunos, etcétera).